Entre niebla y sol, la primera del año (Por Sebito)

Este sábado tuve el placer de darme un rulo con una pareja a la que apenas conozco pero de la que me han dado muy buenas referencias. A las 9:30 AM apareció en el motoclub un tal cei.be, debía de venir lo menos del Polo Norte pues traía la cúpula llena de hielo y los intermitentes también, hasta en la chupa tenía carámbanos:
Pues cacharreamos un par de horas en las motos: buscar una masa rebelde, una revisión de las bujías…casi dio más faena sacar el depósito con su funda Bagster que el resto, luego tiramos al encuentro del tercer participante en la rutilla. Había una niebla meona aunque aquí por Lugo es normal en días de anticiclón, es garantía de que después abrirá:
Efectivamente, abrió pero sólo a ratos, en otras partes nos íbamos a meter de cabeza en la niebla de nuevo, afortunadamente brillaba el sol cuando nos encontramos con el restante colega del trío:
Un tal Ecrins, lo conozco poco y no tengo demasiadas referencias, a ver si con unas cuantas salidas más llegamos a tomar confianza…
Pues desde Taboada donde estamos tiramos hacia el Miño, cruzándolo por el llamado oficialmente puente de Mourulle sobre el embalse de Belesar:
Un poco de información al respecto, a cargo del colega Ecrins (este tío promete):
Antaño no había demasiados puentes para cruzar el Miño, solía hacerse con barcas de fondo plano llamadas “batuxos” para pasar sobre todo las uvas de los viñedos de una a otra orilla, así se hacía por estas zonas hasta los años 40 del siglo pasado. Astutamente y previendo la construcción anunciada de un embalse, en el año 45 se construyó aquí un puente de hormigón…
Que por supuesto el embalse anegó cuando se llenó allá por los años 60, pero la hidroeléctrica se vio obligada a construir otro puente (el actual metálico) para sustituir al antiguo allá abajo. El autor fue el ingeniero José Antonio Torroja Cabanillas, padre de…..Ana Torroja, cantante de Mecano nada menos.
Curiosamente y debido a los remaches, al puente lo llaman “ponte dos parafusos” (puente de los tornillos), cosas de la gente.
Desgraciadamente el embalse (en estos momentos a media capacidad o menos) se llevó un montón de viñedos de sus laderas, esta es zona de la Ribeira Sacra y vemos las piedras que formaban los bancales o “socalcos”, cada uno tenía sólo una hilera de cepas dada la gran inclinación del terreno: 
Restos de antiguas construcciones, una bodega probablemente:
Allí de carreterilla pasamos a una pista a ratos resbaladiza por las hojas y el barro y con la que salimos del río ganando rápidamente altura:
Llegando a esta imponente capilla de Guadalupe erigida en un “souto” de castaños en una gran explanada, realmente lejos de todo y cerca de nada…
Cuenta con fantasma propio y todo, sólo sale al anochecer como los búhos:
Así seguimos hasta un pueblo llamado Currelos, un cruce estratégico por esta zona. Al sol se está divinamente con una luz invernal bien chula, al umbrío no tanto, se mantiene la escarcha nocturna:
En lo alto de maravilla, abajo la niebla deja adivinar por dónde discurre el río:
Continuamos hacia Paradela, un municipio muy extenso con grandes pastos para el ganado, por motivos laborales he andado por aquí bastantes veces y es rara la vez que no me he perdido o he tenido que preguntar, tiene un porrón de cruces y desvíos:
Desde aquí y por una carretera excelente y divertida tiramos hasta Sarria, es el pueblo más grande de la zona y donde pensamos meter algo al estómago, que ya toca:
Eso de “meter algo” es una licencia literaria, lo que hicimos fue entrar en esta pulpería junto al río Sarria (lógico) y darle duramente al pulpo “a feira”, ¡ñam! Estaba de muerte, colegas:
Venía algo escaso “de bombo”, o sea, algo pálido para nuestro gusto, para eso está a mano el pimiento, dulce o picante, con el que cei.be lo dejó en su punto exacto:
 
Lo malo es que los platos tienden a agotarse rápido, se imponía una nueva carga…
Y de postre un casi nada de queso con membrillo. Yo me había hecho idea de no probarlo, pero la gula me venció y les acompañé. Riquísimo, tíos:
Y para finalizar, unos cafeses con “gotas”. Realmente se echan para matar el gusto del café, ya se sabe…
Como señorones, hasta la moto parecía ir luego más ligera...
Lamentablemente el tal Ecrins debe marchar, en casa le esperan obligaciones familiares (una excusa como otra cualquiera, jeje) y le despedimos no sin pena, parece ser un compañero pasable en futuras salidas moteras:
Cei.be y yo seguimos algo más, tirando por el Camino de Santiago en dirección contraria a los peregrinos. Por guapos sitios a la chula luz de la tarde alcanzamos Samos y su monasterio…
Hoy no ando muy fino con las FEM (fotos en marcha), o un edificio tan grandote como éste no me sale cortado, en fin, también uno tiene sus días tontos:
De allí llegamos a Triacastela, que aunque el nombre pueda sugerir “tres castillos” no es así, significa “tres castros”, un castro es el lugar donde habitaban los antiguos celtas, anteriores a los romanos en al menos cinco siglos.
Algo más adelante, Fonfría, casi se adivina el porqué del nombre viendo cómo están las cunetas por esta zona, en cuanto el sol se pone hay que andar con verdadero cuidado, más aún rodando en moto:
Luego Hospital y a la derecha comenzamos a ver los montes de O Courel. Cercano está el alto de San Roque donde estuvimos no hace mucho tiempo:
Algo más de blanco en la cuneta y enseguida alcanzamos O Cebreiro, calles vacías un sábado, cosa rara:
A la derecha el tremendo valle por el que los peregrinos ascienden hasta aquí, desde el río Valcárce a unos 600 y algo metros de altitud hasta los 1.300 que hay aquí, sin duda tienen el cielo ganado:
Así hasta llegar a Pedrafita donde tomamos rumbos opuestos, no me importaría repetir alguna otra rutilla para conocernos algo más, a ver cómo se presenta el año que acabamos de estrenar:
Y poco más. Pensé inicialmente en tirar a casa por autovía, pero era una pena no aprovechar la carretera curveando al sol un poquito más. Allí me ocurrió algo curioso, sentía como una presencia junto a mí, pero por los retrovisores no conseguía ver a nadie, así que tiré una foto hacia atrás a voleo a ver si pillaba algo. ¿Os suena la moto que me sigue? Yo es que las siluetas las adivino fatal…
Luego cayó la niebla de verdad, así que por seguridad más que nada entré en autovía, quien disfrute conduciendo con niebla es que se lo tiene que mirar:
Al llegar seguí un buen consejo de cei.be (me empieza a caer bien este rapaz) y le di una buena lavada a los bajos de la Afri para quitar la sal, creo que de alguna salida anterior ya apunta algo de óxido, tocará fregar:
El mapa del recorrido, no demasiado largo pero muy bien para la época que estamos:
Así transcurrió la cosa, unas veces niebla fría y otras un sol muy agradable. Para un principio de Enero no está nada mal, aunque ya vendrán más y mejores.


 Prometía ser una maravillosa ruta en solitario, a mi bola. Sabia que Sebito y Ceibe tenían lió mecánico en Lugo. Para cumplir y quedar bien les avisé que yo saldría en moto.
 Pero todo se torció. Los tíos fueron resolutivos y al final de la mañana ya me estaban llamando.... a ver ¿Por donde andas?
 Lo sucedido a partir de ahí ya lo comentas Sebito, con ese estilo tan personal. Compartir rutas contigo y con Ceibe quizás no sea tan malo...
 Ahí van una decena de fotillos:
 Al final, mejor bien acompañado que solo...
Enero 2017

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