Recuperando la fiabilidad

 Sorprendentemente resulta que en mi provincia tenia un seguidor de mi blog de crónicas y por casualidades de la vida, nos conocimos. Hace unas semanas quedamos con Rubén y un buen amigo que le acompañaba. Rocío llevaba la Beta y yo esa percherona incombustible que es la Transalp.

Aunque la ruta iba a ser modesta y pretendía enséñales algunos lugares que no conocían, todo fluía bien.

Sin embargo en un momento determinado la Beta se convirtió en una dos tiempos de los años 60 pues humeaba como tal. Paramos, miramos y de culata para abajo estaba bañada en aceite que caía sobre el colector de escape.

Mientras Rocío estaba alga frustrada, yo avisaba a la grúa. Vino pronto pese a que estábamos en un punto sin cobertura móvil.

Por no fastidiarles el día a los compañeros, seguimos la ruta los dos en la TA y ellos en sus GS y Varadero.

Fué un día sin gloria con una pena relativa. Lo sentí por ellos pero he de reconocer que más por ese motorcillo Suzuki de la italiana.

Días después en el taller me señalaron a una tapa de balancines como la causante de la fuga. Alegría enorme pues in situ parecía mas grave.

Para resarcirnos de aquel mal día salimos de nuevo con la pequeña camino de O Ribeiro. Con los amigos ya quedaremos otro día, bueno si a ellos les vuelve apetecer.

 

Un café en un lugar con buenas vistas nos pone a tono y en modo relax.

Poco conocida, la ermita de Erbededo está esta en un lugar tan esquivo como de excelentes vistas sobre el Miño.

Poco después estamos entre los viñedos de la Cooperativa del Ribeiro.

La chica se desfoga un tanto con la Alp y cuando la alcanzo está ensimismada admirando el entorno de Ribadavia.

El pequeño mirador de San Cibrao nos asoma al embalse de Castrelo y a los viñedos. Pero cada uno mira a donde le apetece...

Por cierto, hace unos meses estaban instaladas unas guapas esculturas aquí. Hoy solo se aprecian unos agujeros en el terreno. Un misterio.

Volvemos a las motos.

 

Un poco de asfalto rural y damos por terminada esta excursión para resarcirnos y devolverle la confianza de fiabilidad a la 350.

Y la que compi este encantada, no tiene precio.

Junio 2022